Recién iniciado el siglo XXI, los responsables de Caja Mediterráneo se reunían con un equipo de profesionales, vinculados al mundo del arte contemporáneo, para incorporarlos --como asesores y especialistas-- a un proyecto, que suponía una sólida apuesta en favor de la actual cultura artística española.
Aquella estrategia se basaba en una doble bisagra: por una parte, se iniciaba la paulatina formación de una ambiciosa Colección de Arte Español Contemporáneo y, por otra, se decidía la convocatoria anual de las Becas CAM de Arte Contemporáneo, potenciando la faceta formativa, que nunca ha estado ausente de esta institución.
Con esta muestra de las BECAS CAM DE ARTES PLÁSTICAS se da a conocer públicamente una de las facetas indicadas. En cada edición, de entre los centenares de solicitudes presentadas a nivel nacional, se conceden seis becas, por año. Justamente ahora se exponen los resultados de los dos certámenes habidos entre el 2004 y el 2005.
De alguna manera, el conjunto de esta exposición refleja un cierto panorama existente en las tendencias de la producción artística contemporánea. Priman los decantamientos hacia los nuevos medios y es asimismo innegable la acentuación de la presencia de la tecnología audiovisual en la experimentación más destacada y abundante. Por su parte, el peso de la fotografía y del video sigue siendo evidente, como lo es asimismo la hibridación y el diálogo entre las artes, sin que tampoco falten, otras manifestaciones de carácter más estrictamente pictórico o escultórico.
Sin duda alguna, las Becas CAM de Arte Contemporáneo figuran actualmente entre las más destacadas, preferidas y solicitadas del contexto artístico nacional. Estando bien dotadas económicamente, contando con un adecuado seguimiento y oportuno respaldo, además de disponer de prestigiosos jurados y profesionales ocupados plenamente de su planificación y puesta al día.